sábado, abril 30

Bogotá [-] patrimonio.

No se puede negar que una de las cosas bellas de las ciudades es la capacidad de tener una diversidad arquitectónica que nos permite pasearnos por los siglos y las épocas sin ningún problema.

En Bogotá la arquitectura es muy variada y tan sólo en pocas cuadras se puede pasar de un edificio alto y moderno (al mejor estilo del siglo XXI) a una casa de estilo suizo o inglés y en el centro de la ciudad a casas coloniales. Sin embargo, parece que este patrimonio no está interesando mucho a nuestra alcaldía y muchos menos a los curadores urbanos , pues si nos damos cuenta se están demoliendo estas casas para construir más edificios buscando así una mayor rentabilidad. Resulta que se dice que los impuestos de estos patrimonios arquitectónicos están demasiado altos y por eso es mejor demoler y volver a construir. Pero por otro lado, nos encontramos que edificios construidos hace no mas de 30 años (y sin ninguna característica especial) ubicados en sectores comerciales y modernos (un ejemplo es el edificio que queda al frente del colegio Gimnasio moderno sobre la carrera once) fueron declarados patrimonio cultural y arquitectónico lo que trae como consecuencia que estos propietarios sí pagan los impuestos más bajos y no los relativos al sector. Tal parece que en ni siquiera el patrimonio es respetado.

jueves, abril 28

In memoriam

Flores y pocas palabras para hacer un homenaje a 21 niños y un adulto que murieron por la incompetencia de algunos. Esperamos la justicia nos diga el nombre de los responsables.
28 de abril de 2005:
365 días de aquel día donde una tragedia nos recordó lo vulnerables que son los niños y las niñas de
nuestro DC

lunes, abril 25

Bogotá: Un libro

La Bogotá imaginada, la llena de historias, de finales inesperados y comienzos de tono inusual, ha llegado para quedarse.

Lo digo a propósito de la décimo octava Feria Internacional del Libro que actualmente se realiza en la capital y que nos pone indudablemente a pensar en los diferentes momentos por los que ha pasado la ciudad y nos permite comprender como las urbes en su esplendor diario y en su frenesí, son libros llenos de historias para contar y para salvaguardar la memoria que a veces pareciera no existir.

Fotos, frases celebres, días memorables, generaciones que van y vienen, apellidos que marcan nuestro circulo político y a veces cultural, alianzas, pactos, guerras, presidentes, personajes visibles e invisibles y en fin un sinnúmero de tiempos y espacios que constituyen perfectamente cientos de libros de la Bogotá para contar, para vivir, para recordar y para disfrutar.

Un Distrito Capital que por estos días huele a libro nuevo. Un libro que hay que estrenar. Leamos, aprendamos, hagamos parte de la construcción del lenguaje para dar nuevos significados a las cosas, que al tiempo se constituyen en formas vitales para dinamizar la ciudad y crear diferentes percepciones de lo urbano.

Aportemos en la construcción de textos que evidencien nuestra preocupación por defender nuestra memoria y rechazar la amnesia colectiva que parece apoderarse de nuestras mentes.

sábado, abril 23

Sentimiento capital

Ella abraza la bandera, ellos cantan el himno de Bogotá: Se trata de unos cuantos niños entre los millones que viven y sobreviven en nuestra ciudad.

El himno dice: "Desde entonces no hay miedo en tus lindes, ni codicia en tu gran corazón" Una ciudad que no produzca miedo: una ciudad donde los niños y las niñas tengan espacios suficientes para jugar (parques), para aprender (bibliotecas y colegios), para caminar (andenes y alamedas) pero sobre todo justicia social, donde la tributación de los que tienen los medios, se revierta en mejor calidad de vida para los que no. Donde la responsabilidad social sea un compromiso de todos y donde no busquemos erradicar la pobreza, sino compartir la riqueza. Donde exista cariño y comprensión, diálogo y atención. Difícil tarea en una ciudad de millones de rostros anónimos, pero no imposible si empezamos por hacer lo que nos toca hacer a diario de la mejor forma, con alegría, con una sonrisa, ¡CON HUMANIDAD!.

FELIZ DÍA NIÑOS Y NIÑAS DE BOGOTÁ

Las fotografias son de la inauguración de las olimpiadas del Colegio Compartir-Bochica

lunes, abril 18

Bogota [+] tecnología

Que buena idea esa que surgió de la Secretaria de Tránsito y la administración distrital, al querer reemplazar las libretas de comparendos rosadas, blancas y azules por tecnología de punta. Se trata de palm que bautizaron como "comparenderas electrónicas" *. Una excelente oportunidad para que seamos mejores ciudadanos y colaboremos en aras de expandir y mantener el sistema integral que controla el tránsito de Bogotá.

Vigilar la absurda corrupción que se maneja dentro de la institución ojalá sea tan importante como la cuantiosa inversión que acaban de hacer con las 70 comparenderas que ya se encuentran en las calles. Además, esto sirva para controlar los desmanes a que nos vemos expuestos todos los días cuando de infracciones se trata. Y es que eso se da de lado y lado, los policías ofrecen y los ciudadanos sobornan, los policías piden y los ciudadanos dan. Así no debería ser. Bueno saber que ya contamos con tecnología para casos como éste y seguramente de parte y parte se hará un esfuerzo por mitigar la corrupción y acatar las normas.

*Nombre como fueron presentadas a los medios de comunicación.

sábado, abril 16

Organización de_vida

Bogotá sigue en su eterna construcción. Volquetas, retroexcavadoras, cintas amarillas y negras, hombres paleteros (guías de tránsito en las obras) y barreras de plástico verde son parte de nuestro actual paisaje. La paciencia de los bogotanos se ha puesto a prueba los últimos años, los trancones y las demoras producidas por las obras son extremas, sin embargo hay que ser justos: la organización y la seguridad ha mejorado sustancialmente*. Sentimos la incomodidad pero gracias al esfuerzo logístico y a las normas de señalización la ciudad no ha colapsado. Parece que todo está planeado: personas limpiando los residuos que caen de las volquetas cerca a las obras, semáforos provisionales, cintas y barreras de protección, vallas informativas por todo lado y centros de atención al ciudadano para informarse de los proyectos o para quejarse, autos escolta en el translado de maquinaria pesada. En tres palabras: el caos organizado. De esa forma la espera se hace más llevadera y cuando las obras empiezan a ser entregadas la calidad de vida se ve recompensada.

* Silencio reflexivo y cuestionante por los niños del Agustiniano que murieron y por los que nadie aún ha respondido.

viernes, abril 15

¡Un ejemplo de comportamiento!

En este fin de semana supe que es necesario una reflexión sobre esta sociedad que estamos construyendo.
Supuestamente estamos en una época en la que se rechaza la violencia y en la que se dice que todo se puede solucionar hablando, pero nos damos cuenta de que realmente a todos nosotros nos falta mucho por aprender. En los eventos que atraen a muchas personas es donde más claramente se ve cómo la agresividad brota por cada uno de nuestros poros sin el mayor esfuerzo para contenerla y pareciese que a nadie le importara.
Se dice que los “incultos” sólo son aquellos que no han tenido la oportunidad de estudiar, pero créanme cuando les digo que en todas las clases los jóvenes hacen de las suyas. ¡¿Cómo es posible que todavía se piense en tirar botellas de plástico, y hasta de vidrio, en las cabezas de la gente sólo porque a alguien no le gustó lo que el otro dijo o hizo?! Y que tal el hecho de querer pegarle a otra persona porque lo pisaron o lo empujaron. Y lo peor es que la respuesta a eso son risas, carcajadas y alientos para hacerlo de nuevo.

Por otro lado, es insoportable también ver cómo se juega con el tiempo de la gente. ¿Porque los eventos no pueden comenzar a la hora indicada y, al contrario, tenemos que esperar hasta dos horas para que empiece el espectáculo? ¿Será que aquí vivimos bajo el pensamiento que entre más se hace esperar el público más importante es el evento? Realmente la fama de incumplidos que nos hemos ganado muchas veces no es gratis, pero afortunadamente sí existen algunos organizadores que se interesan por cambiarla. Ojalá todos siguieran esos pequeños ejemplos que pueden hacer de éste un lugar mejor.

miércoles, abril 13

Bogotá de dios_es

Los millones de bogotanos creemos en algo. En el 20 de julio unos agradecen, buscan consuelo, otros fortuna. Se repite la escena en el Señor Caído de Monserrate, otros dan gracias en la Iglesia de Santa Martha, miles entonan cantos en el Campín cada fin de semana, otros levantan los brazos y testimonian sanaciones en el templo Bethesda, pero también están los que buscan respuestas en el Indio Amazónico o en algún "doctor de lo oculto", disponible en muchas de las esquinas perdidas de la ciudad. Una ciudad de cultos, una ciudad de fe, una ciudad de dioses.

Y bueno, con tantos dioses por ahí rondando, qué le queda a la convivencia social. Ojalá, todos esos credos inviten a sus fieles y hasta a sus infieles, a vivir bien y dejar vivir mejor. Hay que luchar contra todo lo que nos separa, con todo lo que une: las mismas esperanzas y los mismos problemas.
Con tantas oraciones, alabanzas, peregrinaciones, promesas, sanaciones y testimonios imposible no construyamos una ciudad mejor.La fe se testimonia con obras. Y bueno, para los que no creen en nada, pues mejor tarea: demostrar que así no haya cielo esperado, o infierno temido se puede ir por ahí por las calles haciendo el bien, o por lo menos no haciendo el mal.

Y siendo coherente con mi credo, empezaré a perdonar: Te perdono luchito por acabar la ciudad, por jugar con la esperanza de muchos con tu Pan y circo. Pero como mi perdón es limitado, le dejo el resto "Al de arriba".

lunes, abril 11

Una mano en el "considere" ¿y la otra?

Parece que a Lucho este fin de semana se le dio por empezar a recuperar espacio público perdido en algunas zonas de Bogotá. Los barrios el Restrepo y Lucero Alto aparecen de primeros en este plan. Sin embargo, no todo lo que brilla es oro, porque las promesas de reubicación se quedaron en veremos (aunque eso no es lo que dice en la pagina de la alcaldía) En todo caso, si no queremos gente en la calle, hay que reubicarla. Pero ni de lo uno, ni de lo otro. Y ahora resulta que para ganarse lo de la papita del día los vendedores diseñaron una nueva estrategia. Bolsas negras repletas de mercancía van de un lado para el otro. "Luchito póngase la mano en el considere" dicen todos. Finalmente la platica tiene que salir por algún lado. Hay que "bajar bandera" a la hora que sea llueva, truene,relampaguee,... o aparezca luchito ufanándose de haber cumplido.

domingo, abril 10

Las pequeñas cosas


Vivir en sociedad es todo un reto. Ganarse el título de ciudadano es una tarea diaria. Por eso tocando el tema de los problemas de la ciudad: a lucho lo que es de lucho (hagan aquí una lista de los problemas de la ciudad culpa de la administración), pero a los habitantes lo que es de los habitantes. Sucede que nos parece muy fácil pasarnos por la faja toda norma. Lo importante es que el policia no nos vea. Las señales de tránsito solo funcionan con el uniformado al lado, pero no sólo eso, nos parece muy normal fumar en lugares cerrados, botar el papelito en cualquier lugar, pasarnos la calle por debajo del puente, "sacarle el dedo" a la buseta en donde sea y otras cuantas "perlas ciudadanas".Pequeñas normas que molestan a algunos, pero importantes normas que buscan organizar una ciudad que requiere compromiso de todos los que la vivimos o la sufrimos.

miércoles, abril 6

El muerto está volviendo a la vida

El muerto se está empezando a levantar, aún huele feo, pero ya está la vida volviendo a él. Se trata del centro de Bogotá.

Su recuperación se está tomando en serio y eso traera para la ciudad un nuevo espacio que habiamos perdido. Pronto el antiguo Hilton serán un centro comercial, esto traera más vida al sector: no solo secretarias y jefes fugitivos visitaràn el natural Parque Central Bavaria, el Museo Nacional recibirá los visitantes que se merece (ya viene la exposición de Egipto), su café es un sitio especial para llevar a alguien especial.La plaza España (calles 11 y 11 A entre carreras 18 y 19) se entregó a la ciudad hace unos días. Allí los ropaviejeros tienen un entorno ordenado y digno para su actividad, además se puede caminar hasta la plaza de Bolívar por un nuevo eje peatonal. ¿miedo para caminar por el centro? pues siguen habiendo ladrones pero la policia comunitaria (al estilo pacific blue) está muy presente, coga su morral durito y a disfrutar... el muerto ya no lo es tanto, a caminar Bogotá, a disfrutar el centro. ¡Que pereza solo el plan de centro comercial! Eso si, amigo luchito y Corporacion La Candelaria: ¿que pasa que se está dejando deteriorar este insigne barrio?.
Nota: Aplausos a las Universidades: Tadeo, Central y los Andes que se están metiendo la mano al bolsillo por Bogotá.

lunes, abril 4

Así juega la ciudad.

Se podría decir que a la ciudad le gusta, como a nosotros, divertirse. A su manera, ella juega nosotros y nos sorprende con sus acciones.
Pienso que el clima hace parte de uno de sus tantos juegos. Al empezar el día un sol matutino se abre paso entre las nubes y logra, poco a poco, desplazar ese viento frío que azota la ciudad. A medida que pasan las horas ese gran astro amarillo y sus fuertes rayos se instalan, pareciese que indefinidamente, en el gran cielo azul. Chaquetas, bufandas, sacos, gorros y guantes se van viendo desplazados por modas más tropicales, livianas y coloridas.
Muchos dicen que la Bogotá de ahora no es la misma de hace cincuenta años. Quedaron atrás los tiempos de días lluviosos y grises, y los colores oscuros y la gente tapada hasta más no poder. Hoy Bogotá es una ciudad más viva. Blusas ombligueras, pantalones pescadores, escotes, faldas, zapatos de todos los colores y sin medias, y gafas oscuras hacen parte de la nueva ciudad.


Pero a penas estamos en la mitad del día. Al llegar la tarde las nubes vuelven a retoman su poderío sobre la capital y unas cuantas gotas de agua empiezan a opacar el día. Todos empezamos a correr y a buscar un lugar donde escamparnos. Sin embargo, dos horas después la lluvia se va y el cielo vuelve a despejarse y el sol a salir.
Los días en Bogotá son toda una sorpresa. No se sabe que va a pasar después. Muchas veces ni sabemos cómo vestirnos para estar de acuerdo con el clima. Pero si nos ponemos a pensar tampoco es tan malo como parece, se podría decir que tenemos todas las estaciones en un día o en una semana. Viéndolo así puede ser envidiable, ¿no creen?

domingo, abril 3

¿Troncal de la caracas?


Increible escuchar como muchos de los habitantes de nuestra Bogotá denigran del oportuno servicio que nos ha venido prestando transmilenio hace 5 años. Es cierto que la cantidad de gente que utiliza el servicio ha aumentado y también lo es el hecho de que en las horas pico se torna insoportable, que roban, que la gente se empuja, grita y pelea, pero tampoco como para decir que "es el peor de los servicios y que seria mejor que nos devolviéramos a la época de la troncal de la caracas". Eso es estar muy mal. Estoy indignada. Pensemos en lo mejor para Bogotá y no nos quitemos la oportunidad de disfrutar obras valiosas como esta. Critiquemos, pero propongamos.

sábado, abril 2

Cine en Bogotá

Cuando uno va a cine en Bogotá parece más una fiesta del que más plata tenga para gastar que una buena idea para disfrutar al mismo tiempo que se cultiva la cultura. Lo digo por que hay que planear todo con anterioridad, no sea que la entrada esté tan cara que alguno de los amigos que nos acompaña tenga que quedarse por fuera. Luego de que el plan está concretado y todos estamos adentro listos para ver la película que hemos decidido, el hambre ataca. Ni modo de comernos una Snickers, porque es demasiado cara y pequeña que no alcanza para todos, así que mejor optamos por un paquetico de algo. Uhm... ¡imposible!. Las salas de Cine Colombia, Cine Mark y hasta Procinal tienen precios tan elevados que finalmente el hambre desaparece y mejor compramos una gaseosa de 14 oz, de a sorbito para cada uno y ¡ya! Que comience la película. Eso si no ha de faltar el que tiene más platica y compra algo para compartir o el que ha logrado con bastante destreza encaletarse algo en los bolsillos, en las medias, los zápatos, ¡que se yo!
Todo esto para decir dos cosas: la primera, que aunque ya hay bastantes salas de cine en Bogotá con una propuesta arquitectónica hermosa, baños limpios, sillas muy cómodas, excelente sonido e imagen y demás, los precios no dejan de ser aterradores y la segunda, que si queremos una Bogotá culta, que consuma cine y no piratee tanto para ver en casa, necesitamos precios cómodos accesibles para todos los bolsillos. ¡Cultura audiovisual de calidad para todos!